lunes, noviembre 10, 2025
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truco de la abuela para cultivar anis en macetas

El anís es una hierba aromática cuyas semillas se utilizan para preparar infusiones y realzar el sabor de panes y pasteles. Esta pequeña planta produce sus semillas entre 5 y 6 meses después de la siembra. Se puede plantar en macetas y crece sin mayores problemas de plagas ni enfermedades. Si quieres saber más sobre sus cuidados hasta la cosecha, mira el siguiente video.

Para cultivar anís, se recomienda preparar el suelo, sembrar en primavera, regar con regularidad y fertilizar si es necesario. El anís prefiere suelos bien drenados, expuestos al sol y con un pH ligeramente alcalino. Se puede sembrar directamente en el terreno o empezar en macetas y luego trasplantar.

Preparación del suelo:

Suelo: El anís prefiere suelos sueltos, bien drenados, con buena profundidad (50-150 cm) y ligeramente alcalinos (pH entre 6,3 y 7,0).

Labranza: Labrar, rastrillar y abonar el terreno antes de sembrar.

Encalado: En suelos ácidos o neutros, se puede realizar un encalado para mejorar la alcalinidad.

Siembra:

Tiempo:

Se siembra en primavera.

Siembra directa:

Si se siembra directamente, la profundidad de siembra es de 2 cm y la distancia entre plantas de 20-25 cm.

Siembra en macetas:

Se pueden germinar las semillas en macetas o cajas de siembra y luego trasplantar.

Riego:

Riego constante hasta que las plantas se arraiguen, luego pueden soportar sequías.

Cuidado de las plantas:

Riego:

Riego regular, pero evitar el encharcamiento.

Fertilización:

No suele ser necesario fertilizar, a menos que el suelo esté muy agotado. Se puede utilizar compost o estiércol bien descompuesto.

Poda:

No es necesaria, pero se puede podar para mantener el tamaño en caso de cultivar anís estrellado como seto.

Plagas y enfermedades:

El anís es relativamente resistente, pero puede verse afectado por hongos y bacterias si se riega en exceso. Se recomienda regar con moderación y aplicar fungicidas si es necesario.

Cosecha:

Tiempo:

La cosecha se realiza en verano, cuando las semillas están maduras pero aún no se han dispersado.

Método:

Se recolectan los frutos de anís cuando están secos y de color marrón claro.

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